El chico llega por detrás y sin previo aviso le clava la verga a su madre. La mujer se queda toda sorprendida, ella limpiaba el baño como cada mañana y no se podía imaginar algo así. Es cierto que este chaval es su hijastro, osea que no corre su misma sangre por las venas, pero joder ¡que falta de respeto!. A quién se le ocurre meterle así la verga a su madre por sorpresa, sin permiso, menos mal que la mujer es toda una puta y le gusta. Esta madurita no se puede resistir aunque sea su hijo quien la folla, una verga es una verga...