Su hermano tiene algo contra ella y la puede chantajear como quiera. Eso la pone en una situación difícil, una tan complicada que va a terminar haciéndole una mamada a su propio hermano. Mientras están en el coche, el hermano se saca la polla y le dice que, para que no la traicione, tiene que mamársela y conseguir que se corra. Ella llora y se niega, pero al final tiene que acabar metiéndosela en la boca. Por desgracia para ella, el hermano tiene una polla mucho más larga de lo que se habría imaginado y le cuesta mucho metérsela dentro hasta la garganta.