A esta chica japonesa le hace mucha gracia el tipo que la ofrece dinero, por eso le entrega su coñito por tan solo 200 dolares. Y es que en realidad ella no lo hace por dinero sino que le motiva la situación. Su tren llega en 25 minutos y un desconocido le dice que nunca ha visto un coño jápones. Esto a la muchacha le hace mucha gracia, y además el chico le parece atractivo. Total que en esos 25 minutos da tiempo a echar un buen polvete. Por allí mismo, en los alrededores de la estación o quizá en el cuarto de baño. Algún lugar encontrarán y este caballero por fin va a catar el delicioso coño de una japonesa...